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La agricultura circular y el consumo responsable

17/03/2023

La agricultura circular es el presente ya de los sectores productivos primarios. Llamamos agricultura circular a esa formar de trabajar el campo enfocada además en regenerar suelos y minimizar al máximo el impacto que esta actividad productiva tiene en el medioambiente, limitando al máximo el uso de fertilizantes químicos así como la producción de desechos.

El objetivo de la economía circular es reducir las emisiones de CO2 y contribuir a través de las prácticas agrícolas a luchar contra el cambio climático.

La ONU (Organización de las Naciones UnidasH describe la agricultura circular como aquella que «se enfoca en el uso de cantidades mínimas de insumos externos con el objetivo de regenerar suelos y minimizar el impacto en el medio ambiente.

Además, ayuda a garantizar una reducción en el uso de la tierra, limita el uso de fertilizantes químicos y la producción de desechos.

Recursos limitados

No cabe duda de que los recursos del mundo son limitados pero vivimos en una sociedad en la que nos comportamos como si no lo fueran y jamás se fueran a agotar: el modelo actual toma recursos del medio natural de forma constante para producir productos con una vida muy corta, que hace que sean desechados en un periodo muy corto de tiempo para posteriormente, comprarlos de nuevo.

Ello nos ha llevado a una situación insostenible, con la vegetación, los suelos y los océanos y mares sobre explotados por la acción del hombre.

Por eso se hace cada vez más preciso poner en marcha acciones que nos lleven a rediseñar el modelo económico actual que promuevan procesos circulares en todos los sectores económicos, que reintegren los residuos en otros ecosistemas y que se activen procedimientos que nos lleven a una economía circular que dé el salto real para el cumplimiento de las 8R: Revaluar, Reconceptua- lizar, Reestructurar, Redistribuir, Relocalizar, Reducir, Reutilizar y Reciclar.

En este punto, la agricultura tiene mucho que aportar. La reutilización y el reciclaje de materiales dentro de las prácticas de agricultura circular son una forma de producir sostenible, que pone especial atención en el cuidado del planeta pero que además contribuye a reducir la pobreza, incrementa la seguridad alimentaria y promueve hábitos de consumo responsable.

Las tres etapas de la agricultura circular

Hay tres fases o etapas para llegar a la agricultura circular.

1. Regeneración de los suelos. Es la primera acción, encaminada a adoptar prácticas para incrementar la fertilidad y limitar su erosión. ello se consigue apostando por los cultivos locales.

2. Regenerar los ecosistemas. Esta segunda acción requiere de prácticas orientadas a reducir la contaminación medioambiental, abandonando progresivamente el uso de productos químicos sintéticos y valorizando los residuos agrícolas de la zona.

3. Regeneración del conocimiento: Esta fase requiere de una formación constante de los profesionales que se dedican al sector agrícola y está orientada a adquirir nuevos conocimientos para abrir nuevos escenarios y nuevas prácticas que contribuyan a consolidar las dos etapas anteriores. 

La regeneración del conocimiento de los profesionales requiere una formación intensa en las técnicas agrícolas que se utilizaban en el pasado, unas técnicas que contribuyen a regenerar los suelos.

Son técnicas basadas en la rotación de cultivos, eligiendo variedades de plantas que sean capaces de enriquecer los suelos; evitar el arado profundo y el estrés mecánico del suelo, que limita su fertilidad; apostar por la cobertura vegetal como abonos verdes y reducir al máximo los residuos; utilizar el excedente para alimentar al ganado y al mismo tiempo, fertilizar orgánicamente los suelos con el abono orgánico de las producciones ganaderas.

Un informe del Gobierno de España sobre agricultura circular y consumo responsable afirma que «el consumo sostenible, consciente, transformador, solo resultará posible en la medida en que exista un tejido productivo que responda en su práctica económica a dichos valores».

El mismo informe hace hincapié en utilizar todo el conocimiento de las generaciones pasadas pero también de los sistemas más vanguardistas para mejorar los rendimientos de la agricultura circular. «En este marco, cobran importancia actividades como el uso de imágenes satelitales para la teledetección del estado sanitario de los cultivos o modelos predictivos que pueden optimizar el uso de los insumos y que permiten aplicar intervenciones específicas», afirma. 

Por lo tanto, es necesario seguir trabajando en la búsqueda de sistemas agrícolas que sean cada vez más sostenibles y sin duda, la agricultura circular juega un papel determinante en todo ello.

Este artículo se ha realizado en el marco de la Resolución de IVACE de concesión de una subvención al Consejo de Cámaras de la Comunitat Valenciana, para el fomento de la Sostenibilidad y Desarrollo Sostenible en el año 2023.